Dada la especificidad de cada caso, se instrumentan entrevistas individuales con los padres, como así también con los equipos de profesionales externos de los alumnos.
Esta modalidad ocupa un papel preferencial en el quehacer cotidiano, ya que permite mantener canales de información, contención y orientación.
Asimismo se llevan a cabo reuniones grupales, en las que se informa sobre determinadas dinámicas y se reciben propuestas que luego serán analizadas para su posible implementación.
Las clases abiertas, ferias y exposiciones son oportunidades para que familiares y profesionales compartan con los alumnos sus actividades habituales.