Los grupos escolares son mixtos y están conformados por un mínimo de seis alumnos y un máximo de doce, teniendo en cuenta la edad, problemática y nivel de los alumnos. Se asegura así una educación personalizada en todos los niveles de la enseñanza. Se emplean métodos y estrategias adecuados a cada problemática.
Los profesionales intervinientes están formados en metodologías que les permiten acompañar a los niños y jóvenes, e interpretar sus necesidades, procurando los estímulos apropiados. Se trata de una individuación didáctica basada en la comprensión y detección de habilidades, en armonía con sus ritmos de aprendizaje, para establecer distintos niveles de exigencia y secuencias pedagógicas que más se adecuen a cada alumno